Operación bikini: liposucción para lucir cuerpazo en verano

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Aunque parezca mentira, los días de sol y playa se acercan y con ellos la Operación Bikini. Por eso, hoy voy a dedicar el post a hablar de la cirugía estrella de esta época, la liposucción. 

La gente piensa que la liposucción es para adelgazar y eso no es del todo cierto. Si bien es verdad que se pierde volumen, lo que realmente intentamos es moldear la zona y dejar una figura bonita. Sin embargo, es importante saber que una liposucción no te libra de engordar en un futuro si no te cuidas aunque sí te permitirá engordar con una silueta más proporcionada.

Esta intervención consiste en aspirar la grasa que consideramos que sobra y después la piel ha de retraerse, por lo que no todas las zonas del cuerpo son candidatas por igual a esta cirugía. Las zonas estrella que quedan muy bien son las cartucheras, muslos y rodillas. Personalmente una zona que pienso que marca la diferencia es la cintura; ese michelín de los flancos que no desaparece con nada y hace que una paciente nunca haya tenido cintura por delgada que esté consigue una mejoría espectacular con este procedimiento.

Hay que tener precaución a la hora de plantearse una liposucción en la barriga. En la mayoría de los casos, para mejorar una barriga con michelines, hay que asociar liposucción (para vaciar la grasa) y una miniabdominoplastia o abdominoplastia (estirar la piel que sobra) para conseguir un abdomen plano y firme. Os comento esto porque a menudo la piel de esta zona no se retrae muy bien, por lo que si solamente realizamos una liposucción conseguiremos vaciar la grasa, pero es muy probable (claro está que depende del caso) que la barriga quede fofa y poco firme ya que sobrará la piel que no hemos quitado. Y esto no ayuda nada en la Operación Bikini.

Lo cierto es que con el moldeado de toda la zona corporal -abdomen, cintura y piernas- es posible cambiar totalmente la silueta de una paciente.

Como siempre que vas a someterte a una cirugía estética del cuerpo, lo “ideal” (aunque no siempre es posible), es que te la hagas cuando estás en el peso en el que querrás mantenerte después.

Operación bikini: De la liposucción al lipofilling

Las últimas tendencias son reutilizar la grasa que sacamos con la liposucción para mejorar la apariencia del culo. Tendencias que famosas como Kim Kardashian o Jennifer Lopez han probado y que me parecen del todo exagerado, no hay que llegar a esos extremos. Este método, conocido como lipofilling, consiste en procesar la grasa que hemos extraído e infiltrarla para mejorar la forma de la zona glútea. Por ejemplo, hay mujeres con el culo plano que mejoran muchísimo con algo de proyección (el resultado sería un culete respingón). Otro ejemplo es el hundido en la cadera donde se apoya la braguita y que algunas mujeres tienen marcado. Pues con esta técnica se moldea también su figura.

Obviamente, estas intervenciones se deben hacer en un quirófano de hospital aunque no precisan de ingreso y la paciente se marcha a casa el mismo día. Si la liposucción no es pequeña, se recomienda hacerlo con sedación o anestesia general según el caso. Si no, es suficiente con anestesia local. La recuperación es rápida aunque hago especial hincapié en que hay que llevar una faja durante un mes después de la cirugía y hay que hacer varias sesiones de drenaje linfático para deshincharse. Aunque los resultados ya se pueden intuir en el postoperatorio inmediato, hay que esperar unos meses para ver el cambio definitivo.

Así que ya no hay excusas para lucir tipo, ya sea para la Operación Bikini del verano o la operación “di adiós a ese michelín”.  Sea como sea, lo importante es sentirse bien con una misma, y como siempre digo, “no es cómo te ves, es cómo te sientes”.

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