Cirugía íntima, adiós a un tema tabú

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Desde hace ya algún tiempo, han crecido las peticiones que llegan a mi consulta sobre la estética íntima. Y es que la cirugía íntima, es decir, de los genitales femeninos está en auge y actualmente comienza a ser una de las más demandadas en cirugía plástica. Por eso hoy quiero hablaros de manera general sobre este tema.

El incremento del interés por la estética de nuestros genitales se debe a muchos factores. Uno de los que ha influido enormemente es el tema de la depilación. “¿Qué tiene que ver la depilación con la estética de nuestra zona íntima?”, os podéis preguntar. La respuesta es sencilla: Cada vez se estilan depilaciones con el vello más corto y eso hace que aflore una anatomía que antes estaba totalmente escondida.

Lo bueno de que exista este tipo de cirugía íntima es que hay una fácil solución para mujeres que se no se sienten del todo cómodas con la anatomía de sus partes íntimas y esto puede influir en que sus relaciones sexuales estén condicionadas y no consigan disfrutar de manera plena durante el acto sexual.

Luego está el tema del postparto. Muchas mujeres se preguntan: “¿Qué ha pasado allí abajo? Eso no es lo que yo recuerdo de antes del embarazo”. Es importante que sepáis que hay solución para los cambios que se producen en este proceso. Tanto a nivel estético (introito abierto) como a nivel funcional. Es muy común que algunas mujeres consideren que sienten de manera diferente o incluso que su sensibilidad en el momento del coito ha disminuido después de la maternidad. Hay que saber que esta sensación disminuida puede mejorar con cirugía de rejuvenecimiento de la zona.

Con el paso de los años, cuando llega la menopausia dentro de los muchos cambios que se producen en el cuerpo hay algunos concretos que afectan a nuestros genitales, envejeciéndolos, atrofiándolos. Combinando varias técnicas quirúrgicas podemos conseguir un rejuvenecimiento genital completo eliminando así estos cambios tróficos externos. Con la cirugía también podemos mejorar las molestias internas secundarias debido a la escasa lubricación y así conseguir una hidratación de la vagina.

Es importante acudir a un profesional especializado en cirugía íntima para alcanzar un excelente resultado, es decir, conseguir una mejoría estética y funcional global. Dado el incremento por el interés en este tipo de cirugías, en el año 2014 realicé un training intensivo en el Ospedale Maggiore di Milano. Para ello, acudí en cuatro ocasiones a Italia y realicé una formación especializada en cirugía de este tipo. En muchos casos, cuando quieres obtener un resultado excelente no hay que tratar una cosa aislada sino que se debe llevar a cabo un rejuvenecimiento global de los genitales femeninos externos.

Técnicas y tratamientos para mejorar nuestra zona íntima

Así pues, como este campo es desconocido para la mayoría de mujeres, os paso un breve resumen de las técnicas que podemos realizar con el objetivo de conseguir que cada una de nosotras se sienta del todo a gusto con su cuerpo y pueda disfrutar plenamente durante sus relaciones íntimas.

La mayoría de cirugías se realizan en quirófano con anestesia local o sedación . Son cirugías cortas, entre una y dos horas y no requieren de ingreso en el hospital. Un resumen de estas técnicas son:

• Labioplastia: Remodelación de los labios menores hipertrofiados para conseguir una mejoría estética y solucionar la incomodidad o molestias que pueden llegar a producir unos labios grandes.

• Lipofilling o relleno de grasa: Mejoran la apariencia después de los cambios tróficos secundarios a la menopausia. Además podemos conseguir un estrechamiento vaginal para aumentar la sensibilidad en el momento del coito.

• Vaginoplastia: Es una cirugía a nivel del canal vaginal para corregir las secuelas secundarias al parto.

• Reconstrucción de himen: Consiste en la restitución de la membrana himeneal (himen) a su estado original previo al inicio de las relaciones sexuales.

En la consulta, también se pueden resolver otro tipo de problemas gracias a la medicina estética sin la necesidad de pasar por un quirófano:

• Infiltraciones de Botox: Se utilizan para solucionar un problema de dispareunia o dolor al coito. 

• Rellenos con ácido hialurónico: Consiguen una mayor firmeza y turgencia de la zona genital.

• Aumento del punto G: Este tratamiento consiste en la inyección de una sustancia inocua a nivel del punto G vaginal con la idea de producir un aumento de sensibilidad y conseguir para la mujer unas relaciones sexuales más gratificantes.

Cabe recordar que cada proceso tiene unas indicaciones concretas para el postoperatorio. Dependiendo del  tratamiento que llevemos a cabo es posible que debamos evitar tener relaciones sexuales durante unos días o semanas.

Como he comentado al principio del post, la cirugía de los genitales femeninos está en pleno apogeo. Parece que, poco a poco, las mujeres estamos rompiendo el silencio de temas que antes eran tabú. La sexualidad femenina es una de ellas y como consecuencia también la cirugía íntima. Tener relaciones sexuales nos concierne a todos. Si las mujeres nos sentimos bien e incluso orgullosas de nuestros genitales, ganaremos en autoestima y seguridad.

Como digo siempre, no es cómo te ves, es cómo te sientes.

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